En CEDECO tenemos una actitud, mejorar. Vemos como los proyectos formativos de las empresas un año más crecen. Esto hace a las personas y a las empresas mejores, en eficacia, fiabilidad.
En CEDECO pensamos que las personas logran más autoestima, las empresas valor, con esto consiguen que las demás personas y empresas quieran estar junto a ellas, porque las valoran. Formar al personal, hacer las cosas mejor, esto hace que el proyecto de empresa y personal siga hacia delante, mejore.
La misión de CEDECO es trabajar para seleccionar a los mejores profesores informáticos, mejorar los métodos, objetivos y contenidos de cada plan de formación y que estos se correspondan con las tareas en el puesto de trabajo, lograr que el calendario del curso sea compatible con la disponibilidad de los participantes
Nuestro objetivo es ayudar a la persona que gestiona la formación en la puesta en marcha del plan formativo, desplazar nuestros ordenadores a su empresa, controlar que todo el proceso se está haciendo de forma correcta, evaluar los resultados y todo esto ofreciendo unos descuentos a nuestros clientes como agradecimiento a su fidelidad.
En CEDECO llevamos desde 1983 aprendiendo nuevas metodologías de formación. Nuestros orígenes se remontan a 1913 cuando CEDECO se crea con la finalidad de formación a distancia para todo el estado español. En aquel entonces nuestro lema era, que CEDECO llegará tan lejos como llegue el cartero.
En 1926 CEDECO tenía más de 30.000 alumnos en toda España. Desde entonces seguimos trabajando en la enseñanza y esto nos avala como una alternativa a tener en cuenta.
En CEDECO tenemos una actitud, esperamos poder seguir animando a las empresas a que evalúen la puesta en práctica de los nuevos conocimientos y esto nos sirva a las personas que nos dedicamos a la formación como una herramienta que acredite nuestra eficacia profesional.
Siempre con el propósito de poder demostrar que la formación es rentable, los profesores-consultores de CEDECO estamos a su servicio para trabajar en estrecha colaboración.
